Muchas veces la arquitectura es criticada por ser primariamente elitista. Sin embargo, es una moneda de dos caras en la que la funcionalidad equilibra la estética. Con la capacidad de diseñar estrategias de soluciones radicales, los arquitectos se encuentran igualmente a la vanguardia de la resolución de problemas complejos. El contexto del sudeste asiático ofrece un desafío exigente con varios problemas sociales, brindando a los arquitectos la oportunidad de realizar diseños humanitarios para la comunidad.
El Sudeste Asiático comprende muchos grupos sociales diferentes, cada uno lidiando con su propio conjunto de problemas. Algunos problemas que siguen siendo comunes son la falta de viviendas asequibles, la pérdida de medios de vida basados en la agricultura tradicional, las preocupaciones ambientales y la desaparición de la identidad social. La rentabilidad se convierte en un aspecto importante para la arquitectura social, donde el diseño ingenioso y personalizado debe ser asequible.
A lo largo de los años, el campo de la arquitectura se ha desarrollado rápidamente en países como China, India, Vietnam, Bangladesh, Corea, Singapur e Indonesia. En estas naciones se están desarrollando arquitectos talentosos, educados y experimentados en las preocupaciones de su gente. Con el poder de traducir las necesidades de la comunidad en programas construidos, el arquitecto asume responsablemente el papel de trabajador social.
Centro de Memoria Cultural Rohingya / Rizvi Hassan
La comunidad rohingya de Bangladesh ha vivido en la incertidumbre la mayor parte de sus vidas, encontrándose en campos de refugiados y enfrentando cambios radicales en su estilo de vida. Una encuesta realizada por la Organización Internacional para las Migraciones mostró que el 75% de los refugiados rohingya declararon la "crisis de identidad" como una fuente principal de estrés y disminución del bienestar. Los rohingya han perdido más que su tierra - también están perdiendo su cultura, idioma y tradición. Para luchar por la identidad perdida de su comunidad, el Centro de Memoria Cultural Rohingya ofrece un espacio para que los refugiados se sientan reconocidos.
El arquitecto Rizvi Hassan continuó el proyecto con contribuciones de la comunidad. El equipo usó referencias de modelos arquitectónicos en Myanmar hechos por artesanos rohingya, imitando de cerca sus estructuras nativas. Varios talleres participativos con líderes clave de la comunidad rohingya informaron el diseño impulsado por la cultura. El volumen es un ejemplo de cómo la arquitectura puede ayudar a las comunidades a recuperar su identidad y celebrar sus historias.
Viviendas voluntarias para niños sin hogar / Anupama Kundoo Architects
Por encargo de la ONG Volontariat, con sede en Pondicherry, se diseñó un conjunto de casas inspiradas en la artesanía local para alojar a niños sin hogar. El trabajo de Anupama Kundoo ve la accesibilidad a través del lente de la sostenibilidad para satisfacer las necesidades del proyecto y de los niños. Las casas fueron construidas con tierra apisonada extraída del sitio con mano de obra local, sustentando la economía de la región.
Se utilizaron muchos materiales no convencionales y "residuos" para cumplir con el presupuesto del proyecto social. Las ruedas de bicicleta se utilizaron como encofrado para las ventanas y luego se reutilizaron como rejillas para las mismas. Botellas y vasos de vidrio se utilizan como unidades estructurales en mampostería y partes de aberturas en la corona de cúpulas curvas catenarias. A diferencia de la mayoría de las soluciones de vivienda de bajo costo y bajo impacto, estas casas tienen formas inusuales y colores divertidos, lo que hace que la felicidad sea parte de la vida diaria de los niños.
Jardín Infantil Agropecuario / Vo Trong Nghia Architects
Este jardín de infancia fue diseñado como una solución a los problemas provocados por la urbanización en Vietnam - contaminación del aire, sequía, inundaciones, salinización y falta de espacios verdes. Dirigido a una comunidad de escasos recursos, el proyecto ofrece alimentación, espacios de juego y contacto con prácticas agrícolas para 500 hijos de trabajadores de la fábrica de calzado vecina. Brindar servicios de cuidado infantil a los trabajadores otorga alivio, mientras que los niños pueden enriquecer su bienestar mental, físico y social. El jardín infantil hace que la educación agrícola y las grandes áreas de juego al aire libre sean accesibles para los niños que de otro modo no tendrían estas instalaciones.
VTN Architects combinó materiales locales, métodos de construcción de baja tecnología y estrategias de sustentabilidad para minimizar el impacto ambiental y los costos del proyecto. El costo de construcción se redujo a 500 USD por metro cuadrado, que es competitivo en el mercado vietnamita. Los informes posteriores a la ocupación indicaron cifras de ahorro de energía y agua del 25% y 40% respectivamente.
Microbiblioteca Bima / SHAU Bandung
Con el interés por los libros y la lectura en declive, la tasa de analfabetismo y abandono escolar de Indonesia sigue siendo alta. Desde 2012, SHAU Indonesia gestiona el proyecto '100 Microbibliotecas' con la misión de hacer que la educación y la alfabetización sean más accesibles a través de la arquitectura. Comenzado como una táctica de abajo hacia arriba, las estructuras emplean ideas como la sostenibilidad, el material alternativo y placemaking
Cada microbiblioteca está diseñada para reflejar la identidad del vecindario y servir como fuente de orgullo para la comunidad. Se seleccionan lugares ya activos para instalar microbibliotecas contextualizadas regionalmente. La participación de los residentes en el proceso los animó a preservar y apropiarse de la estructura. Al comprender las necesidades y el contexto locales, las pequeñas intervenciones tienen el potencial de generar un gran cambio social.
