Se dieron a conocer los ganadores del Concurso de anteproyectos para el edificio de oficinas del Instituto Autárquico Provincial del Seguro de Entre Ríos (IAPSER), una convocatoria que promovía la reflexión entorno a la arquitectura de carácter corporativo, solicitando a sus participantes el desarrollo de un edificio institucional de oficinas que cumpliera su función eficientemente y fuera, a la vez, un hito representativo de la identidad y el espíritu de la compañía.
Organizado por el Colegio de Arquitectos de la Provincia de Entre Ríos (CAPER) y auspiciado por la Federación Argentina de Entidades de Arquitectos (FADEA), el concurso buscaba la producción de un edificio que transmitiera los valores de la organización a través de su diseño arquitectónico, incorporando tecnologías innovadoras y conceptos de sustentabilidad convirtiéndose en un aporte urbanístico y programático para la ciudad.
En el período de postulación se recibieron 31 anteproyectos provenientes de diversos sectores de la provincia de Entre Ríos de los cuales se premiaron a un total 3 equipos. Conoce a continuación la propuesta ganadora:
Primer Premio
- Autor: Arq. Sebastian Stechina
- Colaboradores: Carlos Di Napoli, Andrés Francesconi, Ignacio Caron y Ezequiel Paira
Memoria enviada por los autores del proyecto: El proyecto para el Edificio de Oficinas del IAPSER se emplaza en un área caracterizada por su fuerte potencial paisajístico, en una situación de borde entre el tejido urbano y el río, en relación directa con la plaza del Patito Sirirí, la cual forma parte del Parque Urquiza.
La ciudad y el parque: Con nuestra intervención proponemos extender el Parque hacia la Ciudad, absorbiendo los cuerpos de los edificios mediante su integración con el paisaje verde. Con la construcción de la Nueva Sede del IAPSER buscamis disolver el límite entre el Parque y la Usina para que el nuevo edificio se defina como un “puente” y no como un límite infranqueable.
Revitalizar el conjunto: Creemos que es necesario pensar el sector con una mirada integral y de conjunto. El proyecto pone en relevancia los espacios intersticiales resultantes de la intervención y la articulación entre el Nuevo Edificio, el Complejo Cultural, La Vieja Usina, el Centro Provincial de Convenciones y el Parque. Es así que el espacio público adopta "a la manera medieval" múltiples configuraciones y usos posibles: parque, plaza, calle, paseo, loggia, patio y mirador.
Accesos / conectividad: En pos de favorecer el uso peatonal de estos espacios y potenciar la conectividad, se resolvió unificar el sistema de acceso vehicular de todo el predio –sea para estacionamiento o para movimientos logísticos– limitándolo a la calle "manda peatón" que vincula las calles Gregoria Matorras y San Martín.
Pre existencias: Se pone de manifiesto la relación que existe entre los distintos “patrimonios” que conviven en el entorno, tanto el tangible como el intangible: ya no hay un edificio de valor patrimonial, sino que el proyecto, en una mirada más amplia y abarcativa, pone en valor el entorno, las preexistencias y sus particularidades.
La Nueva Sede del IAPSER: Apostamos a una imagen institucional asociada a la proyección del paisaje y el patrimonio. Un edificio donde las energías renovables y la incorporación del verde son protagonistas, apostando a la idea de perdurabilidad en un sentido más amplio.
Como premisa de diagramación de las oficinas y puestos de trabajo proponemos no resignar las visuales hacia el Rio, por lo cual adoptamos un planteo tipológico que respalda dicha decisión. El edificio se organiza a partir de la planta baja, la cual posee un uso exclusivamente público. En la misma se incorpora un Salón de Usos Múltiples y un bar, el cual se vincula de forma activa con un patio de Esculturas.
En el desarrollo en altura, se incrementa el nivel de restricción de los accesos en proporción directa con el aumento de especificidad de las áreas y de la relación interna entre las mismas. En la azotea se ubican las instalaciones complementarias, tanques de reserva y dispositivos de climatización y generación de energías renovables; Se propone una expansión-mirador en la gran superficie de Terraza Verde, al resguardo de una pérgola cubierta con especies vegetales.
El edificio se concibe como una estructura modulada, versátil, factible de ser montada en tiempos acotados de ejecución, apelando a tecnologías locales. Es una estructura porticada mixta, con perfiles laminados y losas pretensadas, con carpinterías y equipamiento de alta prestación acorde a una imagen corporativa contemporánea asociada a la institución que alberga.
Los espacios soterrados son viables a partir de la lectura del estudio geotécnico, los cuales liberan superficie en planta baja para ser ocupados por cocheras y espacios de mantenimiento. La azotea recibe los espacios técnicos y de generación de energías renovables, tamizada por una “cubierta verde” que mitiga el asoleamiento en la cara más expuesta del edificio. La propuesta de envolventes está orientada hacia un menor consumo de energía para iluminar los espacios de trabajo, la cual está tamizada por la frondosidad del entorno vegetal existente.
