El brutalismo es un estilo arquitectónico que se originó en la década de 1950 y se popularizó en la década de 1960. Su nombre proviene del francés "béton brut", que significa "concreto en bruto" ya que este material es uno de los elementos más característicos del estilo. Sus principales características son el uso aparente del concreto, ofreciendo visuales en donde la textura y tonalidad natural son los protagonistas de las edificaciones. Los edificios brutalistas suelen presentar una estética austera y masiva, con formas geométricas simples y repetitivas. El uso de materiales industriales y técnicas constructivas innovadoras también es común en el brutalismo.
Cuando le preguntaron a Tadao Ando, arquitecto japonés ganador del Premio Pritzker de 1995, cuál sería el elemento más consistente en su obra, respondió sin pestañear: la luz. A través de su arquitectura, Tadao Ando se apropia de la luz y la sombra de forma casi coreográfica. En ciertos momentos, la sombra proyectada en un muro de hormigón parece más una impresionante obra de arte. En otros proyectos, son los reflejos en la superficie del agua los que transforman por completo nuestra comprensión del espacio. Su enfoque arquitectónico arraigado en la arquitectura tradicional japonesa y potenciado por un vasto vocabulario arquitectónico moderno, provocó profundos cambios en nuestra disciplina durante la segunda mitad del siglo XX, situándolo como una de las figuras más importantes del regionalismo crítico. Cada uno de sus proyectos presenta soluciones individuales que están profundamente conectadas con sus contextos específicos – como la Iglesia de la Luz, la Casa Koshino o el Templo del Agua – acercando la arquitectura tradicional japonesa a la universalidad de la arquitectura moderna. Supo reproducir la luz difusa del interior de las casas japonesas, filtrada a través de paredes de papel, mediante el uso creativo de los materiales y la configuración sencilla de los espacios.
Concreto sin finos con muestras de escoria de acero por L.Korat et al. (2015). Imagen vía ResearchGate. Con licencia bajo CC BY-SA 3.0
La industria de la construcción es una de las más grandes del mundo, y el cemento y el hormigón son, literalmente, los componentes básicos de su éxito. Evolucionando desde cuevas prehistóricas hasta los rascacielos de hoy, las estructuras de concreto han sido y seguirán siendo componentes vitales de la civilización moderna, brindando un soporte confiable y duradero para edificios, carreteras, puentes, túneles y represas. Tanto es así que el hormigón es el material más consumido en la Tierra, solo superado por el agua, mientras que el acero utilizado para el refuerzo es, con diferencia, el metal más utilizado. Pero esto no está exento de altos costos ambientales: el concreto es responsable del 8% de las emisiones globales de CO2, muchas de las cuales provienen de la extracción y el transporte de materiales agregados como arena, grava y piedra triturada.
Agregue hojas de col, cáscaras de naranja, cebollas, plátanos y unas rodajas de calabaza para obtener... cemento . Así es, investigadores de la Universidad de Tokio en Japón han desarrollado una técnica a través de la cual es posible producir cemento a partir de desechos de alimentos. Además de usarse en la construcción, la iniciativa innovadora también es comestible. Puede convertir el cemento hervido en una comida deliciosa ajustando los sabores, agregando condimentos y rompiéndolo en pedazos.
A large-area elemental map (Calcium: red, Silicon: blue, Aluminum: green) of a 2 cm fragment of ancient Roman concrete (right) collected from the archaeological site of Privernum, Italy (left). A calcium-rich lime clast (in red), which is responsible for the unique self-healing properties in this ancient material, is clearly visible in the lower region of the image. Image Cortesia de the researchers (MIT)
Hay acueductos romanos construidos hace más de 2.000 años que todavía están en uso. El Panteón de Roma sigue siendo la cúpula de hormigón no armado más grande del mundo, con un diámetro de 43,3 metros. Al mismo tiempo, no pocas veces, vemos colapsar estructuras con menos de una década. Comprender por qué las estructuras romanas permanecen en pie ha sido objeto de estudio de varios investigadores de todo el mundo. ¿Por qué, incluso en ambientes hostiles como el agua de mar o zonas sísmicas, estas estructuras permanecen intactas? ¿Hay algún material o método milagroso que se haya perdido en la historia? Un grupo internacional de investigadores liderado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) arrojó luz sobre estas preguntas, descubriendo que estas estructuras tenían una capacidad de auto-reparación previamente descuidada, y cómo esto puede tener un gran impacto ambiental para crear estructuras de concreto más duraderas en el futuro futuro
Uno de los elementos más importantes en la arquitectura son las circulaciones verticales que se traducen en elevadores o escaleras, y aunque algunos despachos deciden abordarlo de forma discreta, algunos otros optan por prestarle específica atención y para convertirlas en una pieza escultórica. Las escaleras helicoidales son algunas de las preferidas al momento de querer enfocar la atención y en nuestra consciencia colectiva guardamos algunos icónicos ejemplos, como lo es el caso de la escalera en la Casa O´Gorman, dicha pieza le dio cierto carácter a la obra y es casi imposible imaginarla sin ella.
Las infraestructuras urbanas entregan comodidad a sus habitantes y mitigan posibles riesgos de desastres, como inundaciones. Los subterráneos, en concreto, quitan de nuestras vistas los sistemas urbanos y se configuran como auténticos laberintos bajo las calles. Distribución de agua potable, saneamiento urbano, alcantarillado e incluso cableado eléctrico y de fibra óptica, pasan bajo nuestros pies sin que nos demos cuenta. Para ello, la industria lleva más de 100 años desarrollando piezas prefabricadas de hormigón, que aportan rapidez de construcción y adecuada resistencia al esfuerzo. Los tubos de hormigón de sección circular, en sus más diversos diámetros, son quizás los conductos más utilizados y ubicuos en el mundo. Pero hay quienes también utilizan estas estructuras en usos arquitectónicos creativos.
Desde Taiwán hasta los Países Bajos, pasando por Uruguay y Georgia, Jakub Sawosko ha recorrido el mundo fotografiando minuciosamente las obras arquitectónica en hormigón en Instagram, bajo el nombre de @sh_sh_welt.
Después de vivir rodeado y fascinado por la arquitectura de hormigón de posguerra en Europa en sus primeros años, Sawosko se trasladó a Taiwán, donde finalmente se dio cuenta de que el modernismo también había influido mucho en aquel país. "Sentí que esta arquitectura taiwanesa merecía más reconocimiento", explica Jakub en conversación con ArchDaily vía Instagram.
Investigadores de materiales y los estudiantes de Ph.D del Imperial College de Londres, Sam Draper y Barney Shanks han ganado el PREMIO OBEL 2022 por Seratech, una solución para hormigón sin emisiones de carbono. Con especial atención este año en las “emisiones incorporadas”, el jurado del PREMIO OBEL seleccionó a científicos para obtener el premio de arquitectura para “fomentar soluciones interdisciplinarias innovadoras a los desafíos del cambio climático”.
Cuando las ciudades crecen, impulsadas por una población en expansión, la vivienda se convierte en un componente esencial del carácter urbano. En todo el mundo, los gobiernos y estados han propagado experimentos de vivienda, con resultados mixtos y, sin duda, opiniones mixtas. Las urbanizaciones de la era soviética de Europa Central y Oriental son particularmente interesantes en ese sentido. Estos proyectos de viviendas masivas han sido considerados como adefesios y vistos como estructuras monolíticas sin imaginación. El legado de estos desarrollos, sin embargo, es mucho más complicado que eso.
Con un aire de sencillez y sabiduría el ingeniero Julio Vargas Neumann nos recibe. Sus dos canes acompañan el descenso después del ascenso necesario para ingresar y nos acompañan también los muros de piedra que definen el lote. Nos sentamos e iniciamos -o continuamos- la entrevista y conversación en relación al valor de las shicras, los materiales locales y la construcción en tierra. Dialogamos también sobre las críticas al cemento, aluminio y al acero así como las perspectivas sobre el futuro de los materiales en el Perú y en el mundo. Asimismo, discutimos sobre el largamente inatendido y recursivo problema rural sudamericano y la necesidad de cambiar inexorablemente de paradigmas y prioridades.
La inmensa escultura de Michael Heizer, la Ciudad, una ambiciosa obra de arte de un extraordinario tamaño, comenzará a aceptar visitas del público a partir del 2 de septiembre de 2022. El anuncio ha sido realizado por la Fundación Triple Aught, la organización sin ánimo de lucro encargada de gestionar la supervisión y el mantenimiento a largo plazo de la inmensa escultura de Michael Heizer. La obra de arte, de una milla y media de largo y casi media milla de ancho, está situada en un tramo remoto del alto desierto de Nevada. Los trabajos en la estructura comenzaron en 1972, cuando el artista tenía 27 años.
Fundamental para el desarrollo de las grandes metrópolis como las conocemos hoy, el cemento es un material utilizado históricamente cuyos avances tecnológicos revolucionaron la técnica y tecnología de la construcción civil, posibilitando la verticalización de la construcción y la densificación de los centros urbanos. El cemento, ya sea añadido al agua y arena para hacer mortero o combinado con acero y arenas para formar concreto, cumple diferentes funciones en una obra, apareciendo desde la estructura hasta el acabado.
Las antiguas murallas ciclópeas se construían superponiendo piedras en bruto, apoyadas unas sobre otras, sin utilizar argamasa. El nombre deriva de los cíclopes, los gigantes de la mitología griega, ya que su construcción requirió un esfuerzo aparentemente sobrehumano debido al peso y la dificultad de levantar y colocar cada pieza de pared. El hormigón ciclópico, a su vez, mezcla esta antigua técnica constructiva con materiales y técnicas contemporáneas. Lo que lo diferencia del concreto tradicional es esencialmente el tamaño del agregado grueso, que tradicionalmente se compone de piedras, pero también puede incluir ladrillos o restos de concreto. Nuestra sección de Proyectos incluye ejemplos de esta técnica constructiva que, a diferencia de los cíclopes, lleva claramente las huellas de los trabajadores que la construyeron. Hablamos con Rafic Jorge Farah, de la Oficina São Paulo Criação, sobre su experiencia con esta técnica en obras recientes.
Como respuesta a desafíos globales como el cambio climático, la discriminación y la vulnerabilidad física, diseñadores e ingenieros de todo el mundo han desarrollado materiales de construcción innovadores que priorizan el bienestar humano en proyectos urbanos, de arquitectura e interiores.
El término "tormenta perfecta" se refiere a un evento, generalmente desfavorable, que se exacerba como resultado de una confluencia de factores negativos o impredecibles. Es muy utilizado para retratar fenómenos meteorológicos, pero también abarca otros campos, como la economía, por ejemplo. Esta analogía también puede funcionar para la relación entre la crisis climática y la dependencia mundial del hormigón. Como se demuestra en el informe de Chatham House, si bien el cemento –un elemento esencial para la fabricación de hormigón– es un material extremadamente dañino para el efecto invernadero y la crisis climática, ya que representa alrededor del 8% de las emisiones globales de CO2, se prevé que su producción mundial aumente durante los próximos 30 años para satisfacer las demandas de la rápida urbanización en regiones como el sudeste asiático y el África subsahariana. Al mismo tiempo, el último informe del IPCC advirtió que solo tenemos 11 años para reducir las emisiones y evitar daños irreversibles por el cambio climático. En otras palabras, la industria del cemento se enfrenta a una expansión significativa en un momento en que las emisiones deben caer rápidamente – una tormenta perfecta.
Al abordar el proceso de reciclaje de materiales de construcción, existen una serie de obstáculos para lograr un resultado integral y efectivo. Primero, la demolición descuidada puede hacer que el proceso sea muy complejo, ya que a menudo se mezclan productos con diferentes productos de reciclaje. Además, no todos los materiales se pueden reciclar o procesar de manera eficiente, ya que muchos todavía necesitan procesos costosos o demasiado complejos. Pero la industria de la construcción, siendo un gran contribuyente a la producción de desechos y emisiones de gases de efecto invernadero, también ha desarrollado múltiples tecnologías nuevas para mejorar sus prácticas. Este es el caso del proyecto WOOL2LOOP, que busca resolver uno de los mayores retos en la aplicación de un enfoque circular a los residuos de construcción y demolición.
Exacerbada por la pandemia, la crisis de vivienda se ha convertido en un fenómeno global. El aumento de precios, falta de acceso y malas políticas habitacionales se han traducido en mayor escasez y condiciones de precariedad. El caso de Chile no ha sido una excepción. Es más, según los últimos informes emitidos por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), existen “más de 700 mil familias con problemas de allegamiento y viviendas irrecuperables, sumando a las 81 mil familias que viven en campamentos.”