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Arquitectos: Fernán Olarte Pinto / OG Arquitectura & Construcción
- Área: 648 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Juan Serrano
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Proveedores: Hunter Douglas, Accesorios y Acabados, Best Life Tecnology , Concremovil, Diaco, Ecoenergy, Etalum
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto está ubicado en La Mesa de Ruitoque, municipio de Floridablanca, en el departamento de Santander. La Mesa de Ruitoque se encuentra situada a 7 km al sur de la meseta de Bucaramanga y posee un clima tropical con temperaturas entre los 20º y 27º. Esta es una localización privilegiada con vistas hacia el interior de las montañas por el norte y hacia la ciudad de Bucaramanga por el sur, proporcionando una vista completa a este bello paisaje.
La idea inicialmente era construir una casa de campo familiar en un lote con una pendiente alta de 1.997 m2. Esta propuesta se vio alterada debido a la pandemia del COVID-19, cuando el cliente decidió convertir el proyecto en su vivienda residencial. Esto modificó el primer plan, sin embargo se mantuvo el concepto de arquitectura abierta planteado inicialmente.
El programa se desarrolla principalmente en dos plantas distribuidas de la siguiente manera:
La entrada se genera a través de una serie de patios que articulan la zona de parqueo y los accesos a la vivienda. Se ingresa a la casa por un patio que remata en un muro de concreto del cual sale un espejo de agua alimentado por la lluvia. Perpendicular a este muro una celosía indica el acceso, dejando entrever la vivienda y el paisaje al fondo.
El volumen del primer piso es un prisma rectangular, que se desarrolla de manera paralela al paisaje, en la parte más alta del terreno, aprovechando la privilegiada vista hacia la ciudad y las montañas lejanas. Este volumen alberga hacia el interior las zonas de servicio y hacia el exterior las zonas sociales. De estas se despliega la zona de terraza y piscina que se convierten en un mirador del entorno natural del terreno y el paisaje lejano.
En el entorno natural del terreno una serie de senderos permiten llegar al refugio familiar, una pequeña cabaña de madera en medio del bosque. Asimismo, desde estos senderos se puede acceder a las zonas técnicas y de huéspedes que se encuentran debajo de la plataforma mirador.
Por otro lado, al segundo piso se accede a través de un punto fijo bordeado de vegetación e iluminado por una marquesina. Este volumen alberga la zona privada: por un lado la habitación principal bordeada por una terraza con vistas hacia la ciudad, articulada por medio de la sala de televisión con un volumen perpendicular al principal en el cual se encuentran tres habitaciones secundarias integradas por un una terraza perimetral que genera una relación con el paisaje de La Mesa de Ruitoque. Desde el segundo piso se puede acceder a la cubierta verde, allí se encuentran los paneles solares que proveen de energía la casa y un mirador con vista panorámica.
La propuesta arquitectónica se puede definir como dos volúmenes rectangulares puros dispuestos en L, bordeados por vegetación que contrasta con el concreto, el material exterior principal de la casa. En el interior predomina la madera que se integra con los jardines, diseñados en función de los espacios, estos tienden a generar transparencias que gracias a la implantación de la casa se relacionan con el paisaje exterior.