
Los recientemente llamados guetos verticales por el Intendente de Santiago son un mal para la ciudad y sus habitantes, de ello no hay discusión si consideramos las condiciones inhumanas en que viven sus residentes y las externalidades negativas para el espacio público, transporte y calidad de vida de cada barrio. ¿Quiénes son los responsables de estas intervenciones urbanas? Unos dicen que los arquitectos, otros que las inmobiliarias y algunos señalan a las autoridades. La verdad es que todos somos responsables de tal aberración urbana, incluso aquel ciudadano anónimo.