El arquitecto chileno Miguel Eyquem, cofundador del Instituto de Arquitectura de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y miembro fundador de la Ciudad Abierta de Ritoque, falleció en la madrugada de hoy según indica por redes sociales la Corporación Cultural Amereida - Ciudad Abierta.
Hay dos razones principales por las que las ventanas de los barcos son redondas. Son más fáciles de sellar y, sobre todo, son más resistentes a la alta presión que ejerce el agua sobre ellas. Esto se debe a que las esquinas son los lugares donde, naturalmente, se concentran las tensiones, debilitando la estructura en su conjunto. Es también por eso que las ventanas de los aviones son pequeñas y redondeadas; las altas presiones se distribuyen en las formas curvas, reduciendo la probabilidad de grietas o roturas.
En la arquitectura, las aberturas circulares son bastante antiguas. El Oculus ha sido una característica de la arquitectura clásica desde el siglo XVI. También conocido con la expresión francesa oeil de boeuf (u ojo de buey), las aberturas circulares o semicirculares se forman a partir de la construcción de arcos de mampostería, que permiten la creación de aberturas y la formación de vanos solo mediante el cierre de las piezas. Con el paso del tiempo y la incorporación de nuevas tecnologías y conocimientos constructivos, crear aberturas rectangulares en edificios comunes se ha vuelto más sencillo, racional y económico que los redondos. Aún así, continúan figurando en una multitud de proyectos.
Una fotografía de una clase con a.o. Martha van Coppenolle en el Technisch Instituut van Sint-Maria de Amberes, hacia 1930. Colección Ciudad de Amberes, Letterenhuis. Imagen cortesía de Wiki Women Design
A través del proyecto Wiki Women Design, el Flanders Architecture Institute ha estado trabajando para "sacar de la sombra a las mujeres que han dejado su huella en el campo del diseño en Bélgica". Usando Wikipedia como plataforma de lucha, la iniciativa organiza maratones de edición y sesiones de redacción con el objetivo de compensar la desinformación histórica y recuperar los aportes de las mujeres diseñadoras en el país.
Hotel Guizhou Mountain Forest / Stefano Boeri Architetti. Imagen cortesía de Stefano Boeri Architetti
Cuando nos vimos en la obligación de estar en confinamiento en casa debido a la política de cuarentena auto infligida de la pandemia global por el COVID-19, probablemente se pasó una gran cantidad de tiempo mirando por la ventana. A veces, cuando estamos con cansancio por el trabajo y la vida cotidianos, solo deseamos tener una escapada rápida a los océanos y los bosques, en algún lugar cercano al verde natural.
El próximo martes 9 de marzo, haremos el anuncio de una nueva edición, el Premio Obra del Año 2021, y como antesala de este nuevo capítulo hemos organizado una serie de encuentros virtuales con cada uno de los ganadores del ODA 2020 para conocer en profundidad a los tres proyectos elegidos por nuestros lectores. De esta manera, llevaremos a cabo la premiación de la Obra del Año 2020 a través de una experiencia completamente digital que será posible gracias a la colaboración de nuestros partners Crest y Fundermax.
MVRDV ha presentado su diseño para Marble Arch Hill, una instalación temporal que tiene como objetivo brindar a los londinenses una nueva perspectiva sobre Hyde Park, el corazón de la ciudad. Situado junto al Marble Arch de la ciudad, el proyecto toma la forma de una montaña para brindar a los visitantes vistas excepcionales del parque y de Oxford Street. Concebido a partir de una estructura de andamios, el proyecto es parte de una serie de iniciativas desarrolladas para rescatar la economía de la ciudad pospandémica.
La infraestructura verde es un enfoque que tiene como eje estratégico la planificación territorial y sustentabilidad ambiental - además, es una de las principales respuestas que están emprendiendo comunidades, municipios y gobiernos en ciudades de todo el mundo para enfrentar la crisis climática, mejorar la salud pública, disminuir la segregación social y proteger la biodiversidad. En lo concreto, corresponde a un sistema interconectado de espacios verdes diversos que sostienen una variedad de funciones y beneficios.
En la Bienal de Arquitectura de Venecia 2016, el curador Alejandro Aravena decidió reutilizar 100 toneladas de materiales descartados por la Bienal de Arte anterior para configurar el ambiente de las salas de exhibición. Además de reutilizar 10.000 m2 de placas de yeso y 14 km de estructuras metálicas, la iniciativa pretendía poner en valor, a través del diseño, algo que se desecharía como residuo. Y, sobre todo, permitió sacar a la luz una segunda observación: como arquitectos, generalmente nos limitamos a pensar en nuestros edificios durante el diseño, la construcción y, como máximo, en cómo sus partes resistirán el paso del tiempo. Difícilmente pensamos en qué será de ellos cuando sean demolidos, al final de su vida útil, y esto es algo que, con urgencia, debe entrar en el debate.
UVA La Esperanza en Medellín, Colombia. Imagen cortesía de EPM
Social Urbanism: Reframing Spatial Design – Discourses from Latin America, un nuevo libro de Maria Bellalta, ASLA, decana de la Escuela de Arquitectura del Paisaje en el Boston Architectural College, es una adición bienvenida al creciente número de publicaciones sobre temas orientados a la justicia social forma de urbanismo, arquitectura y espacio público que emanan de Medellín y Colombia. Los logros del urbanismo social se han convertido legítimamente en sinónimo de Medellín en el mundo de la arquitectura del paisaje, la planificación y el diseño urbanos y la arquitectura.