La segunda edición del Premio de Arquitectura Ammodo ha reconocido a 26 galardonados por sus contribuciones al diseño social y ecológicamente responsable. Seleccionados entre 168 postulaciones de más de 60 países, los ganadores representan una amplia gama de prácticas, desde oficinas consolidadas hasta colectivos emergentes e iniciativas dirigidas por la comunidad. Cada uno recibe una subvención que varía entre €10,000 y €150,000 para apoyar el desarrollo continuo de sus proyectos. Más allá del reconocimiento y el apoyo financiero, la iniciativa de Arquitectura Ammodo también funciona como una plataforma de conocimiento, conectando a los premiados a través de regiones y facilitando el intercambio de ideas sobre temas clave identificados por el comité asesor.
Detrás de capas de yeso, pintura y acabados se encuentra una intrincada red de tuberías, conductos eléctricos, vigas y otros elementos estructurales que hacen funcionar y mantener en pie un edificio, pero que permanecen invisibles a la mirada cotidiana. Dentro de estas capas, se acumulan trazas de diferentes períodos: sistemas reemplazados, adaptaciones improvisadas y soluciones técnicas que alguna vez respondieron a contextos y urgencias específicas. En la reutilización adaptativa, el mayor desafío a menudo comienza incluso antes de que comience la construcción, que es entender qué hay dentro cuando existe poca o ninguna documentación confiable. Durante una renovación, sorpresas agradables o desagradables son inevitables. Lo inesperado es parte del proceso, pero también representa costos, retrasos y factores de riesgo que generalmente desaniman a inversores y profesionales de participar en este tipo de proyectos.
En medio de una era de nuevos paradigmas, la arquitectura hotelera contemporánea se replantea la adopción de nuevas tecnologías, la incorporación de principios de sustentabilidad y eficiencia energética como así también la personalización de las experiencias de sus usuarios. Redefiniendo el diseño de los espacios interiores y exteriores de los hoteles, se integran desde resoluciones de diseño según el clima de cada región hasta aplicaciones de materiales reciclados y diseños bioclimáticos buscando generar el menor impacto posible sobre el medio ambiente.