
En la década de 1920 se terminaba el barrio de viviendas para empleados industriales Cité Frugès en Pessac, Francia. Uno de los actuales 17 sitios de Le Corbusier catalogado como patrimonio de la UNESCO.
.jpg?1473865971&format=webp&width=640&height=580)
La arquitectura, como cualquier otra profesión, necesita herramientas específicas para suceder. Mientras el poeta usa la pluma y el carpintero usa la sierra, el arquitecto también usa algunos instrumentos para traducir sus diseños en muros, pisos y techos. La complejidad de la arquitectura, sin embargo, requiere más que una pluma y una sierra de mano, mucho más que una regla y un tablero de dibujo; se requiere actividad colectiva y múltiples etapas, hasta que se haga la arquitectura real, la concreta, y para esto, hay pasos que deben seguirse y, para cada uno, existen diferentes herramientas.
En arquitectura no hay nadie que no haya fallado. En otras palabras, no hay arquitecto que haya logrado, cada vez, transformar ideas en espacios concretos y construidos. De hecho, este tipo de "fracaso" es muy común en la profesión; el largo e intrincado proceso necesario para llevar una idea a lo concreto significa que la mayoría de nuestros proyectos quedan solo como proyecto. Por lo tanto, dedicamos mucho tiempo a las representaciones, o presentaciones, ya que no sabemos cuando nuestro proyecto se presentará de nuevo.

Bulla es una oficina argentina de diseño del paisaje, planificación urbana y territorial que se ha dedicado durante más de una década a "insertar una agenda de paisaje en la escena pública e intelectual". Por este motivo, realizamos una entrevista a Ignacio Fleurquin, socio fundador, para indagar sobre cómo fueron sus inicios, sus propósitos, sus formas de trabajar, reflexionar, explorar, y su visión sobre el futuro del paisajismo en Argentina.

Con sus farallones y acantilados, las costas rocosas de Perú componen un peculiar paisaje de superficies que se transforman intermitentemente ante la erosión de los mares y los vientos. En estos terrenos heterogéneos y de gran pendiente, realizar una arquitectura integrada al contexto no es una tarea fácil. Desde volúmenes que se incrustan en las laderas hasta casas que incorporan las formaciones minerales en sus espacios interiores, los proyectos que abordan este desafío nos permiten reflexionar acerca de cómo es posible establecer una relación con el entorno natural, diluyendo o tensionando los límites entre arquitectura y paisaje.

El vuelo de un pájaro, una lluvia de verano, la modificación del nivel del mar, los relámpagos en una tormenta o una sequía prolongada son algunos fenómenos naturales que, si bien ocurren con frecuencia, pasan relativamente desapercibidos. Sin embargo, algunos otros son capaces de llaman significativamente nuestra atención, como puede ser la erupción de un volcán, un terremoto, la aparición de un nuevo virus o una gran inundación. Aun así, si los mismos se producen en una región deshabitada y no causan daños materiales considerables, siguen siendo sólo fenómenos naturales. En cambio, si se producen en lugares del planeta donde habitan muchas personas y como consecuencia producen muertes, lesiones, interrupciones en las actividades productivas, grandes pérdidas financieras y la necesidad de desplazamiento de la población, entonces se consideran desastres naturales.

Si bien los espacios públicos de todo el mundo están tratando de innovar e implementar medidas de seguridad para abrir durante la pandemia de coronavirus, Domino Park ha introducido una serie de círculos pintados para el distanciamiento social. Esta intervención estratégica de diseño urbano asegura que las personas "sigan los procedimientos de distanciamiento social adecuados recomendados por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y el gobierno".

La Asociación Nacional de Funcionarios de Transporte de la Ciudad (NACTO por sus siglas en inglés) ha publicado pautas para proporcionar a las ciudades estrategias "para rediseñar y adaptar sus calles para nuevos usos, tanto durante la crisis COVID-19 como en la recuperación". Streets for Pandemic Response and Recovery destaca los enfoques de diseño de calles más actualizados que las ciudades están utilizando en todo el mundo.

El diseño sostenible es más que agua, energía y carbono. Para la arquitectura, está profundamente arraigada en la comprensión de los ciclos de vida y el cambio cultural sistemático. En los últimos treinta años, la palabra "sostenibilidad" comenzó a perder peso al transformarse en una palabra de moda poco definida. Pero las ideas detrás del término general han crecido y expandido, y a su vez, se están diseñando nuevos edificios icónicos para repensar lo que depara el futuro.

En tiempos de confinamiento social, la CNM (Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos del Ministerio de Cultura de la Nación), ofrece un curso gratuito online para descubrir y conocer los grandes tesoros del patrimonio arquitectónico argentino, atravesando diferentes épocas, estilos y regiones. Las clases estarán a cargo de reconocidos expertos en cada una de las temáticas y abarcarán un amplio panorama que comprende desde la Cueva de las Manos en la Provincia de Santa Cruz, hasta modernos edificios en todo el país.
El próximo viernes 29 de mayo se llevará a cabo la charla virtual moderada por Manuel Moreno Decano de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad del Norte en Barranquilla (EAUD) entre Daniel Bonilla del taller de arquitectura de bogotá y Giancarlo Mazzanti del Equipo Mazzanti y el arquitecto Fabián Amaya director del departamento de arquitectura de la EAUD enfocando en la temática "La enseñanza de la arquitectura hoy y mañana".

La Jornada de Sana Distancia en México comenzó el 23 de Marzo de 2020, pero un par de semanas antes, aún ante la recomendación del Gobierno Federal de continuar actividades de manera normal, en redes sociales ya se leía a personas que optaban por replicar el modelo europeo y autoaislarse. Inmediatamente, algunos estudios de arquitectura tomaron la decisión de cerrar sus espacios físicos y trasladarlos al modelo de trabajo remoto, a algunos otros, les tomó más semanas. Sin embargo, este momento de distanciamiento social y físico (espacial) se vive diferente en cada hogar. En los meses que se ha desarrollado esta pandemia se han evidenciado no solo la inequidad hacia las necesidades básicas en zonas urbanas y densas, sino también la fragilidad de cómo se ha establecido el orden social. Ya sea a escala macro o micro, todas estas experiencias suceden y se ven influenciadas por el entorno construido, transformando a la arquitectura en juez y parte de la ecuación.

Al enfrentar emergencias como desastres naturales, conflictos bélicos o pandemias, la arquitectura debe ofrecer soluciones inmediatas y efectivas. En estas desafortunadas circunstancias, la prioridad suele estar en resolver los problemas habitacionales, sin embargo, una vez controlada la emergencia, el foco se mueve lentamente hacia los lugares de encuentro como centros comunitarios, juntas de vecinos y espacios públicos.
Para crear nuevos lugares de encuentro en situaciones de emergencia, los andamios son una buena alternativa si pensamos en la velocidad de construcción y en un presupuesto ajustado. Si bien suelen ocuparse como estructuras provisionales, también permiten componer rápidamente un espacio jugando con las horizontales, verticales y diagonales, y combinándolo con otros materiales como textiles, madera, policarbonato y metal.

Ya sea por sus tonos naturales, por su textura e incluso por la calidez que proporciona, los pisos de madera son ampliamente utilizados y valorados por las personas alrededor del mundo. Sin embargo, trabajar con materiales naturales como las tablas de madera requiere de una gran inversión, mantenimiento periódico y una mano de obra especializada para llevar a cabo la instalación. No es casualidad que existan varios productos que buscan aportar la estética y la comodidad de la madera pero evitando sus contraindicaciones, como el comportamiento frente a la humedad, el ataque de insectos, la necesidad de pulido y vitrificado, o el posible cambio de sus tonos con el sol.
Siendo una de las alternativas más versátiles y prácticas frente a la madera natural, los pisos vinílicos han sido utilizados durante décadas. Sin embargo, con el objetivo de reducir el impacto ambiental de su fabricación, el plástico ha evolucionado para dar paso a los pisos orgánicos, los cuales pueden ser instalados de forma simple y rápida, entregando una alta resistencia al agua y al tráfico en interiores, y una gran facilidad de limpieza y mantención.

Según los registros escritos que nos han permitido estudiar la historia de la humanidad, la "prehistoria" puede definirse como el período de tiempo abarcado entre el 35.000 a.C. y el 3.000 a.C. en el caso del Oriente Medio –en el caso de Europa occidental, se extiende hasta el o hasta el 2.000 a.C.-. Según lo que se pudo observar y registrar, los antiguos constructores ya tenían un profundo conocimiento de las condiciones ambientales y de las necesidades físicas del ser humano. Inicialmente organizados en grupos o tribus, los humanos utilizaron estructuras construidas con piel y huesos de animales para protegerse del clima y las amenazas del mundo exterior. Miles de años más tarde, las primitivas cabañas evolucionaron hasta convertirse en complejas estructuras construidas en ladrillo o barro, asumiendo formas geométricas más definidas con aberturas intencionalmente generadas para permitir la ventilación e iluminación natural de los espacios interiores.
Durante los próximos meses, publicaremos en ArchDaily artículos cortos enfocados en la historia de la arquitectura que pondrán en evidencia los procesos de evolución que ha sufrido el hábitat desde los tiempos primitivos hasta la actualidad. Durante esta primera semana, dedicaremos parte de nuestro tiempo a reflexionar sobre las estructuras de las primeras civilizaciones conocidas por la humanidad: las aldeas del Neolítico, la Mesopotamia y el Antiguo Egipto.

La pandemia de COVID-19 ha transformado la forma en que viajamos y nos reunimos. A medida que las calles y los edificios se vaciaron y las personas practicaron el distanciamiento social, también los aeropuertos experimentaron un tremendo descenso en los pasajeros y vuelos. A medida que la industria de la aviación formó la globalización, también ha contribuido a la rapidez con que se propagó la enfermedad. En una nueva serie aérea, el fotógrafo Tom Hegen explora el impacto de la pandemia en la aviación desde las alturas.