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Arquitectos: taller de arquitectura de bogotá
- Área: 12224 m²
- Año: 2024
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Fotografías:Alejandro Arango

El proyecto se conecta directamente con la red de parques del parque metropolitano Simón Bolívar, generando un puente ecológico para la flora y la fauna local y convirtiéndose en un eje de apoyo al ecosistema que existe entre los cerros orientales y el humedal el salitre. El primer piso es un bioma en donde se recupera la conectividad ecológica a través de un ecosistema compuesto de bosque sabanero y humedal, promoviendo la vida de la fauna local y la diversidad de especies vegetales de variados portes.


Este parque abierto a la ciudad es recorrible en su totalidad y se convierte en la antesala del parque metropolitano Simón Bolívar desde la calle 64 al costado norte. Como complemento se genera una plaza esquinera que fluye debajo de la edificación hacia los accesos del proyecto. Este tratamiento diluye e integra el edificio con la ciudad y el ecosistema del entorno, convirtiendo el edificio en un articulador urbano entre arquitectura, ecología, paisaje y urbanismo.


En el patio número 1 se responde de forma análoga al sistema ecológico de Páramos el cual se encuentra presente en Bogotá y sus alrededores, este sistema es responsable de la producción de agua potable y tipos de plantas como los frailejones. El patio número 2 es una representación de ecosistemas como los existentes en La Guajira o El Tatacoa, donde se evidencian formaciones Xéricas con vegetación seca como diferentes tipos de cactus. El patio número 3 representa un bioma que se encuentra en peligro de desaparición y es muy escaso a nivel mundial, este es el Bosque Seco Tropical.

En cuanto a la cubierta y el primer piso tienen vegetación endémica de la sabana que aportan a la extensión de sistemas naturales próximos como la red de parques urbanos y el Parque Metropolitano Simón Bolívar. Las especies de plantas propuestas en ambos espacios contribuyen a la fauna local, funcionando como corredor y paradero ecológico para las aves que migran del sur al norte del país en ciertas épocas del año. Las etapas de diseño resuelven la totalidad del espacio, tanto exterior como interior.

La comodidad del usuario es prioridad, razón por la cual su tránsito debe ser se suma facilidad. Por esta razón el tránsito vertical se resuelve según uso. Este edificio propone responder a su diversidad en programa categorizado en "Centro día" y "Centro de Bienestar Integral" dirigiendo el tránsito vertical. Se plantea un punto fijo de tres ascensores y dos escaleras laterales. Escaleras, por seguridad y fluidez abren en la totalidad del edificio.

Ascensor uno, actúa de manera similar, con paradas a todos los pisos, sin embargo, es de uso exclusivo de servicios. El ascensor dos, se dirige de los sótanos al piso 5, unidades pertenecientes al Centro día. Por consiguiente, el ascensor número 3, accede a los sótanos, piso uno y del 6 al 13, pisos diseñados al centro de bienestar integral. La fluidez de los elementos horizontales promueve la flexibilidad vertical. Esto disuelve los límites espaciales que pueden presentar las necesidades imprevistas de los funcionarios y/o usuarios.



















