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Arquitectos: Garrido Studio
- Área: 369 m²
- Año: 2025
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Fotografías:Sonia Sabnani
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En un terreno plano y apacible en Godella, a pocos minutos de Valencia, se levanta una residencia que adopta la horizontalidad como su lenguaje principal. El proyecto se articula a partir de geometrías puras, planos contundentes y amplios voladizos que dan forma a una arquitectura masiva pero serena, plenamente en sintonía con el clima mediterráneo.
La interacción entre volúmenes superpuestos, superficies que avanzan y sombras cambiantes otorga a la vivienda una presencia sólida pero equilibrada, integrada de manera natural en su entorno.
El hogar está estratégicamente orientado para maximizar la luz natural en las principales áreas de vida —la sala de estar, el comedor, la cocina y el jardín— generando espacios abiertos y luminosos que se proyectan hacia el exterior. En contraste, las cuatro suites se disponen en una zona más privada y resguardada, pensada para garantizar calma e intimidad.
Las amplias ventanas que recorren la vivienda disuelven los límites entre interior y exterior, permitiendo que la luz mediterránea fluya libremente y que cada espacio se abra directamente hacia el jardín. Esta vocación de apertura se complementa con una fachada terrosa y texturada, cuyo acabado cálido y rugoso acentúa la materialidad de la arquitectura y convierte cada voladizo en un gesto escultórico en diálogo con el paisaje valenciano.
Desde el primer paso, la entrada establece el carácter de la vivienda. Un vestíbulo generoso se organiza en torno a una escalera prominente que introduce verticalidad y actúa como pieza central del espacio. Sobre ella, dos tragaluces dejan caer una luz suave y difusa que revela, desde el interior, la profundidad del gran voladizo exterior. Al avanzar por el vestíbulo, una ventana enmarcada al fondo abre un eje visual directo hacia el jardín, anticipando la relación continua entre arquitectura y paisaje que define todo el proyecto.
En el interior, la residencia ofrece espacios generosos, cálidos y tranquilos concebidos para el bienestar. Las elecciones de material —maderas ligeras, superficies continuas y tonos suaves— refuerzan una sensación de calma que complementa la fuerte geometría exterior del edificio. En las azoteas, 70 m² de terrazas proporcionan rincones íntimos para disfrutar del clima mediterráneo, mientras que el jardín, organizado alrededor de una amplia piscina, se convierte en el corazón social del hogar. Con acceso directo desde la cocina y la sala de estar, esta área al aire libre alberga naturalmente la vida familiar y la interacción diaria con el exterior.
En general, la casa está concebida como un refugio contemporáneo que transmite estabilidad, paz y equilibrio. Sus volúmenes audaces, sombras profundas y ventilación cruzada crean una atmósfera acogedora que no busca dominar, sino acompañar. Es una arquitectura que abraza la luz, se abre al jardín y ofrece un lugar sereno para vivir lenta y tranquilamente, en continua armonía con el clima y el estilo de vida mediterráneo.
