Hace un tiempo se inauguró el nuevo edifico para la Escuela de Diseño de la Universidad Católica, obra del arquitecto Sebastián Irarrázaval. El edificio de 4 pisos se organiza en torno a dos patios de distinto carácter, generando nuevos espacios de mayor intimidad al interior del campus.
El edificio está recubierto de acero corten, material elegido para envejecer junto al edificio, en contraste con la combinación de hormigón y madera clara hacia el interior, que cualifica los espacios de salas y oficinas, patios y circulaciones.
