Inspirado en el crecimiento vegetativo y el andamiaje de bambú de Asia, Thomas Corbasson y VS-A han propuesto un proyecto conceptual de un rascacielos orgánico para Londres, que incorporará los residuos producidos por sus ocupantes. El edificio se elevará verticalmente a medida que el vidrio y el papel necesario para la construcción sea desechado por los residentes del edificio. Se estima que el material reciclado sea suficiente para que la fachada del edificio se pueda producir en un año. El proyecto obtuvo una mención especial en una reciente Competencia de Rascacielos y Super rascacielos.
Entregado por laFondation Wilmotte, el Prix W busca como objetivo impulsar la exploración del patrimonio arquitectónico y su relación con la creación arquitectónica. Para la presente ocasión, la competición proponía el diseño de un centro cultural y de eventos junto a la histórica Torre de Londres.
A continuación, les presentamos la propuesta de Rivas&Ureña Arquitectos, merecedores de la Mención Honrosa en la competición y presentes en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2014.