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Arquitectos: TJAD Atelier L+
- Área: 129365 m²
- Año: 2024

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Un nuevo tipo de arquitectura surgió a mediados de la década de 1990 cuando China permitió que los arquitectos comenzaran a ejercer independientemente de los institutos de diseño administrados por el gobierno. Los principales arquitectos de esta época lograron colectivamente producir un cuerpo de trabajo arquitectónico único, mientras que otros edificios construidos en todo el mundo ya no pretendían estar arraigados en su lugar y cultura.
En Diálogos Chinos, Vladimir Belogolovsky traza un panorama de esta arquitectura china a través de las palabras de sus principales participantes, levantando el velo sobre una prolífica nueva generación de diseñadores, cada uno compartiendo una comprensión altamente intelectualizada y conceptual de la arquitectura. Siguiendo el curso de 21 entrevistas acompañadas de más de 120 fotografías y dibujos de proyectos ejecutados de manera hermosa en todo el país desde principios de la década de 2000, esta publicación abre el proceso del pensamiento de los principales arquitectos del país, proporcionando una visión de sus ideas, intenciones y visiones de manera inusualmente reveladora y sincera.

La estética occidental se basa en el análisis matemático de la estructura formal de un objeto, utilizando leyes de belleza clásicas como el equilibrio, la simetría y la media áurea. La estética oriental difiere en eso, ya que hace hincapié en la experiencia intuitiva, como el "espacio blanco" en la pintura china tradicional, a través de la comunicación emocional con la "imaginería" para producir una determinada "Concepción". El contraste entre la realidad y el vacío permite que florezcan la imaginación y los sentimientos del espectador, permitiéndole darse cuenta de "mostrar la amplitud del cielo y la tierra incluso en un lugar de un centímetro cuadrado".


Pocos países exhiben una historia viva como China. Desde la icónica Ciudad Prohibida hasta diversos paisajes y estilos de construcción, China tiene un rico legado cultural y arquitectónico. Como el mercado de la construcción más grande del mundo, el país continúa invirtiendo en nuevos proyectos. Al mismo tiempo, esta rápida urbanización y desarrollo acelerado se yuxtaponen con antiguos edificios entrelazados con capas de historia y memoria colectiva.

Las técnicas vernáculas y los materiales locales han ganado protagonismo en el debate sobre la arquitectura, pero ¿es posible llevar estos conceptos a los grandes centros urbanos?
El arquitecto amazónico Severiano Porto ya señaló en 1984 la necesidad de pensar en una arquitectura más conectada con su contexto. La lógica del uso de materiales y técnicas locales es cada vez más necesaria cuando pensamos en el impacto que tiene la cadena productiva de la construcción civil en el planeta. No es de extrañar que cada día es más común la cantidad de proyectos basados en el principio de las técnicas vernáculas y el uso de materiales locales, tal como ya lo anunciaba la producción de Severiano desde los años ochenta.

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El arquitecto Li Hua nació en 1972 en China. Estudió arquitectura en la principal escuela del país, la Universidad de Tsinghua, en la cual obtuvo su licenciatura (1994) y su maestría (1997). Continuó sus estudios en la Universidad de Yale, donde se graduó con un segundo Master en Arquitectura en 1999. Luego, se quedó un tiempo en los Estados Unidos, trabajando en Nueva York para el estudio Herbert Beckhard Frank Richlan & Associates. Los fundadores de la firma solían ser socios en la oficina de Marcel Breuer antes de comenzar su propia práctica a principios de los 80. Esta experiencia introdujo a Hua en el manejo de materiales como la mampostería y el hormigón prefabricado al trabajar en proyectos culturales y educativos en la zona de Nueva York. Al regresar a Beijing en 2003, Hua fundó el Estudio de Arquitectura Universal (UAS) con su antiguo compañero de clase de Tsinghua. Paralelamente, comenzó su carrera docente, primero en la Academia Central de Bellas Artes, CAFA y luego en su Alma Máter. En 2009, Hua dejó la sociedad y estableció su propio estudio, Trace Architecture Office, TAO. Su estudio cuenta actualmente con unos veinte arquitectos. Entre los proyectos construidos más destacados del TAO se encuentran la Escuela Secundaria de Huandao en la provincia de Hainan (2018), la Mansión del Café de Xinzhai en Yunnan (2018), la Fábrica de Balsas de Bambú de Wuyishan en Fujian (2013) y el Museo del Papel Artesanal en Yunnan (2010). El arquitecto ganó muchos prestigiosos honores y fue preseleccionado para el Premio Aga Kahn de 2013. La siguiente entrevista se realizó en el despacho del arquitecto en el pueblo de Caochangdi, un próspero centro de arte y cultura en las afueras de Beijing.
